¿Por qué debes mejorar tu educación financiera?
- La educación financiera desempeña en estos momentos de crisis un "papel determinante"
elEconomista.es
A lo largo de la vida académica se aprende una gran cantidad de conceptos que más tarde resultan de enorme utilidad en nuestra vida diaria. Materias como matemáticas o lengua se consideran esenciales, sin embargo en los últimos años, se ha visto la importancia que tiene la educación financiera en nuestra sociedad.
Y es que, la vida está llena decisiones financieras, que tienen consecuencias. Saber sopesar los riesgos y beneficios de una alternativa u otra ayuda a los individuos y a las familias a aprovechar mejor las oportunidades y a conseguir sus objetivos.
Tal es así, que el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, aseguraba hace apenas unos días que la educación financiera desempeña en estos momentos de crisis un "papel determinante" en la prevención de riesgos para las economías de los ciudadanos.
Conocimientos financieros
A pesar de ello, más del 75% de los españoles reconoce en la actualidad que debe mejorar sus conocimientos en materia financiera, según la reciente Encuesta de Competencias Financieras elaborada por el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En general, se considera que las cuestiones financieras son difíciles de entender y la gente reconoce cada vez más que carece de competencias esenciales para tratar y comprender asuntos financieros. Sin embargo, no es difícil de entender si se desarrollan las habilidades y aptitudes adecuadas para comprenderlo y en muchas ocasiones ya disponemos de un conocimiento en algunas técnicas de gestión financiera, pero muchas veces no sabemos cómo acoplarlas dentro de una estrategia adecuada.
Asimismo, como en otros campos de conocimiento, el conocimiento financiero se capta mejor si resulta de tu agrado y/o si estás en contacto frecuente con él.
Mayor ahorro y bienestar
Según señala el Portal de Educación Financiera para Empresarios y Emprendedores, Edufiemp, los individuos con un mayor nivel de cultura financiera tienden a ahorrar más, lo que normalmente se traduce en mayores niveles de inversión y crecimiento de la economía en su conjunto.
Y es que, la educación financiera beneficia a los individuos en todas las etapas de su vida: a los niños, haciéndoles comprender el valor del dinero y del ahorro; a los jóvenes, preparándolos para el ejercicio de una ciudadanía responsable; a los adultos, ayudándoles a planificar decisiones económicas cruciales como la compra de una vivienda o la preparación de la jubilación. Asimismo, contribuye a que las familias puedan ajustar sus decisiones de ahorro e inversión a su perfil de riesgo y a sus necesidades, lo que favorece la confianza y la estabilidad del sistema financiero.
En definitiva, aprender a manejar el dinero, los gastos, las inversiones y los ahorros promueve que las personas tengan una salud financiera positiva y en definitiva una mejor calidad de vida para ellos y sus familias.